Una vez hemos definido la hipótesis relativa a la distribución y
recorridos de la vivienda nos preguntamos acerca de algo obvio. ¿Cómo estaba
cubierto todo aquello? La respuesta surge fácil, con los típicos tejados de tegula a dos aguas. Sin embargo cuando
miramos con mayor precisión la planta, y comenzamos a hacernos una idea de las
dimensiones observamos claramente que no era viable en todos los casos. Por
ejemplo, en el Oecus localizamos un
ancho de 7,16m, lo que nos impide pensar en cualquier elemento de estructura
porticada.
1) Constructivamente:
1.1) Bóvedas.
Como ya sabemos, el gran avance tecnológico atribuido a los romanos es
la concepción de la bóveda y el arco de medio punto como elementos estructurales
irreprochables. Dadas las grandes distancias que encontramos en ciertos puntos
de la Domus (ya comentábamos el caso del Oecus)
no parece descabellado suponer que ciertos espacios se cubrieran con dicho
elemento. Concretamente cabe esperar que tanto el Oecus como las naves de las
termas se cubrieran mediante bóvedas de cañón.
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Termas de Caracalla. (google images) |
En el caso del Oecus cabía pensar en otra solución, (comentada aquí
sencillamente a modo informativo), la cual consistiría en cerchas de madera
bajo las que se colgaría un falso techo de madera ricamente adornado. No
obstante, el Oecus era el símbolo del
poder de la familia residente, lo que nos lleva a dejar la solución del “falso
techo” para el Triclinum de invierno, que igualmente tenía que mostrar riqueza,
aunque en menor grado.
Dado el sistema constructivo empleado en la realización de las bóvedas
podemos (y debemos) cuestionarnos dos
cosas:
-
Los grandes empujes que se dan.
-
El acabado y la cubrición.
-
El material de realización
1.1.1) Empujes.
Si mantenemos la hipótesis de que tanto en las termas como en el Oecus haya bóvedas la solución de los
empujes está más o menos clara, teniendo en cuenta siempre que las termas se
construyen posteriormente.
Tal y como se explica más adelante, el Oecus era el elemento más alto de la vivienda, por ello cabe pensar
en una solución a los empujes en base al peso del muro vertical que se prolonga
de forma que junto con los muros de las estancias aledañas solucionase el
problema. También ayudaría el hecho de que la bóveda fuera de canto rebajado
(como en el Phanteon) lo que
aliviaría considerablemente el peso.
Más tarde, cuando se construyen las termas, no hay tanto problema ya
que por ambos lados cuentan con muros suficientes que hacen las veces de
contrafuertes. En el medio, al ser iguales entre ellas, se compensan los
empujes, permitiendo el funcionamiento óptimo de la estructura. (Ver imagen)
En el plano se remarcan los muros que actúan como contrafuertes en la construcción de la bóveda
1.1.2) Cubriciones.
En la actualidad es lógico pensar que la bóveda se quedara vista de
cara al exterior, aunque si retrocedemos dos mil años en la historia nos damos
cuenta de que en realidad los romanos disimulaban los elementos estructurales
en edificios como las termas dando como imagen una cubierta con diferentes
paños de teja. (Ver ejemplo de la reconstrucción de las termas de Caracalla).
Esto nos lleva a pensar que quizás todas las bóvedas estuvieron
cubiertas mediante paños de tejas que garantizaban la evacuación de aguas en la
cubierta. Generando una dicotomía en relación a las soluciones constructivas
plausibles.
1.1.3) Materiales
Parece clara la idea de que el ladrillo es el recurso básico para la
construcción de bóvedas en el imperio romano tardío, sin embargo, cabe destacar
otra idea, que como posibilidad resulta al principio algo chocante, pero acaba
convenciéndonos al razonar en profundidad.
Quizás la bóveda estuvo echa de piedra, bloques de piedra prismáticos
que unidos trabajarían a compresión. Años más tarde las bóvedas fueron
desmontadas y transportadas dada la carestía de un trabajo de cantería semejante.
Aunque pueda resultar llamativa la hipótesis no debemos desecharla.
1.2) Tegula+Ímbrice.
Otro problema al que nos enfrentamos es la falta de restos de teja,
(únicamente quedan algunos en la Domus de los trabajos de Hércules) lo que nos
lleva a formular varias hipótesis:
-
Cubierta plana: Ciertamente, tal y como podemos
observar en las imágenes bajo estas líneas, los romanos utilizaban la cubierta
plana, cuya impermeabilización es todavía un misterio para nosotros, aunque es
verdad que se daba sobretodo en edificios de carácter público, (suponemos que
por ser más costoso). Reservando a las viviendas el clásico tejado a dos aguas.
No obstante, la ciudad de
Volubilis fue atípica en el sentido de no acatar estrictamente los cánones
constructivos y estilísticos del Imperio, a veces incluso como forma de rebeldía
contra el poder del César. Esto, unido a
que en ciudades cercanas abunda la cubierta inclinada nos lleva a pensar que
realmente la cubierta plana era más un modelo teórico de Vitrubio, que algo
realizable de forma sencilla para una vivienda convencional.
Reconstrucción de Roma. Maqueta (tesoridiroma.net)
-
Pésima conservación del material: tal como
describe Begoña Carrascosa en su libro “Iniciación a la conservación y la
restauración de objetos cerámicos” la arcilla, como elemento fundamental de la
cerámica necesita una conservación determinada en base los aditivos que se
incluyan en la mezcla. Como ya sabemos, los materiales cercanos a Volubilis no
brillaban precisamente por su alta calidad, lo que nos induce a pensar en una
conservación tan mala que a lo largo de estos mil setecientos años se han
desintegrado absolutamente todos los restos de tejas que había en el barrio
norte de Volubilis. Algo quizás excesivo ¿no? La justificación a la
conservación de restos en la Domus de los trabajos de Hércules es sencilla, al
tratarse de una Domus con habitantes pudientes trajeron las tejas de otro
lugar, o al menos en parte.
-
Reciclaje en el siglo III d.C.: Pensar en que
realmente desapareció todo es, en mi opinión algo literalmente increíble, por
lo que surge una tercera hipótesis con mayor fundamento, el reciclaje.
No tenemos que
irnos muy lejos para saber que en tiempos de escasez evitamos comprar las cosas
de nuevo y comenzamos a reaprovechar todo lo que ya teníamos y que aún está en
buen estado. Algo así tuvo que ocurrir en Volubilis.
Cuando el núcleo
del barrio norte se ve desprovisto de habitantes al caer el imperio, los
habitantes de clase baja que había en la ciudad comienzan a construir hacia la
vertiente sur, dejando incluso la parte norte como cementerio en algún caso
puntual. Esto nos lleva a pensar que no sería extraño que se reutilizaran las
tejas ya existentes, sencillamente las cambiaron de lugar, y dado que la ciudad
se conserva en uso durante varios siglos
más creo que la hipótesis más concluyente es que las tejas sencillamente fueron
robadas para construir el “nuevo Volubilis”.
Por este razonamiento, y
descartando las dos primeras hipótesis considero que en Volubilis sí había
tejas, y que por lo tanto las cubiertas eran inclinadas.
2) Geométricamente:
Como paso siguiente a esta conclusión tan determinante surge otro
problema. ¿Cómo sería la planta de cubiertas de esta vivienda?
Esquema de cubiertas (realización propia)
En esta hipótesis podemos encontrar varios aspectos muy interesantes
que tratar al ser determinantes para el desarrollo del modelo.
En primer lugar los distintos niveles de los paños. Dentro de la
tradición constructiva romana era normal que se dieran en este tipo de
edificaciones hasta tres niveles distintos (hablando en alturas) por un lado el
nivel del peristilo, el más bajo, sobre el cual se encontraba el de las
habitaciones, lo que permitía el acceso de luz y ventilación con un pequeño
ventanal.
Podemos ver los huecos sobre la cibierta del peristilo (lalapicera.blogspot.com)
Como tercer nivel, y por tanto el de mayor altura, encontramos la
cubierta del Oecus lo que permitía
resaltar la importancia del lugar más cuidado de la Domus.
Por otra parte, es preocupante la resolución de la cubierta en cuanto
a evacuación de aguas se refiere, ya que por norma se suelen dar cubiertas a
dos aguas que vierten hacia el impluvium
o el perystilum o sencillamente hacia
la calle. Teóricamente es sencillo, pero al tener una planta tan compleja y
enrevesada se hace difícil la creación de paños completos en las termas o en el
impluvium. Por lo que cabría pensar en sistemas de
canalización de aguas entre los distintos paños.